Por Angela Barian
En la última década, las tasas de ansiedad, estrés y depresión han aumentado a niveles sin precedentes, especialmente entre los estudiantes universitarios. Como resultado, las instituciones de educación superior, incluyendo UW–Madison, están trabajando más que nunca para fomentar y garantizar el bienestar de los estudiantes. En una sociedad estresada y centrada en los logros, ¿cómo pueden los estudiantes acceder a la multitud de recursos aquí en la UW para lograr su propio bienestar?
Cada otoño, John Dunne les pide a sus alumnos que visualicen una fresa.
Dunne, Distinguido jefe de cátedra de Humanidades contemplativas a través del Centro de Mentes Saludables de UW–Madison, brinda un curso para estudiantes de primer año llamado “El arte y la ciencia de la prosperidad humana”. El curso integra experiencias de aprendizaje extracurricular con el trabajo en el aula para darles a los estudiantes los ingredientes que necesitan para explorar su bienestar. En ese curso, él realiza la actividad de la fresa.
“Si uno visualiza una fresa con la fuerza suficiente — deliciosa, recién lavada, orgánica, de un mercado, con un poco de salsa de chocolate a su alcance — su boca comenzará a salivar”, dice Dunne. “¿Pero por qué hace eso? No hay ninguna fresa”. Dunne explica que una de las cosas que hace que los humanos seamos únicos es nuestra capacidad de simular una experiencia de una manera que otros animales no pueden. Esa simulación es tan intensa que nos parece real, en nuestra mente y nuestro cuerpo. “No es solo mental, también es físico”, dice Dunne. “Entonces, si pienso en una fresa, aunque no haya ninguna fresa, mi boca comienza a salivar. Porque en mi mente, realmente hay una fresa. Y eso hace que mi cuerpo reaccione”.
Los investigadores lo llaman fusión cognitiva: “En otras palabras, tendemos a fusionar nuestros pensamientos con nuestras experiencias. Creemos que nuestros pensamientos son realidad, y cuanto más reales nos parecen, más efecto fisiológico tienen”. Y Dunne dice que este fenómeno puede contribuir en gran medida a la ansiedad y el estrés: simplemente visualice la prueba más difícil e importante de su vida y sentirá que su corazón late rápidamente. “Pero es un pensamiento”, dice Dunne. “No es una fresa”. Dunne argumenta que la capacidad de los estudiantes para reconocer que no es una fresa — o más específicamente, que esta prueba en realidad no le hará daño — es clave para manejar el estrés y la ansiedad.
Y, si nos fijamos en las estadísticas, parece que los estudiantes necesitan esta lección más que nunca.
¿Una ‘crisis’ en la salud mental de los estudiantes?
Al parecer, Estados Unidos está en un estado de preocupación. Desde mayores de edad hasta niños de jardín de infantes, las tasas de ansiedad (y su contraparte frecuente, la depresión) han aumentado dramáticamente. Y los estudiantes universitarios en particular se ven afectados por esta sociedad estresada: según el Asociación de directores de centros de asesoramiento universitarios, el 60% de los estudiantes dijeron sufrir ansiedad “abrumadora”, y el 40% se sintió tan deprimido que tuvieron dificultades para desempeñarse. La salud mental y el bienestar se encuentran entre las principales preocupaciones en los campus universitarios de todo el país, y por una buena razón. Los investigadores y los expertos de la UW con los que hablamos están de acuerdo en que esto es realmente preocupante.
“No es solo aquí”, dice Dunne. “He visitado algunos lugares para hablar sobre nuestro trabajo y la crisis es evidente en todas partes. Absolutamente, lo llamaría así: una crisis”. Dunne cita varios estudios que indican un aumento constante de la ansiedad entre estudiantes universitarios. “También se observa un aumento gradual en el uso de medicamentos”, dice Dunne. “Tanto es así que cuando uno llega al campus universitario, el número de estudiantes que toman o han tomado un medicamento es uno de cada tres”.
Scott Anderson, un estudiante graduado del Departamento de Kinesiología de la UW y asistente en “El arte y la ciencia de la prosperidad humana”, enfatiza la extensión y la gravedad del problema: “No estamos hablando del tipo de ansiedad donde simplemente se siente incómodo. Estamos hablando de un grado de ansiedad que se considera una discapacidad en algunos casos. Y eso está creando dificultades para las instituciones, cómo acomodamos a las personas y les ayudamos a obtener la educación que desean obtener. Así que realmente estamos ante una crisis”.
Una era de distracción y presión
¿Cómo llegamos a este punto? ¿Y cómo empeoró tanto? Una de las razones por las cuales los estudiantes universitarios en particular están luchando con su salud mental puede deberse a una ramificación de las cualidades que les permitieron ingresar a la universidad en primer lugar, como la tenacidad, la persistencia y los altos estándares. “Los estudiantes de la UW están aquí porque tienen un desempeño estelar en el aprendizaje y el pensamiento”, dice Tamar Kelson, psicólogo senior y proveedor de bienestar en los Servicios de salud de la Universidad. “Tenemos estudiantes muy talentosos e inteligentes. Al mismo tiempo, he notado que los estudiantes a menudo emplean como motivación un juicio interno o una crítica: Si no estudio, fracasaré. Si no me va bien, no entraré a la escuela de medicina. Me tiene que ir bien Hay mucho juicio allí. Y a las personas les gusta aferrarse a ese duro juicio, porque piensan que si no lo hacen no serán exitosas”. En respuesta, Kelson fomenta la autocompasión. “Piense en lo que se dice a sí mismo”, dice ella. “Debe ser al menos tan amable y gentil como lo que le diría a un buen amigo o ser querido”.
Para ilustrar otra razón, Dunne saca un gráfico de la Encuesta anual de la Asociación de Directores de centros de asesoramiento universitarios. La tasa está creciendo sin lugar a dudas, con un notable aumento durante 2009–10. “Esto es importante”, dice Dunne. “Algo sucedió en este momento. Y una de las cosas que sucedió fue el iPhone, con acceso a las redes sociales”. Como señala Dunne, los estudios muestran que el uso generalizado de las redes sociales afecta la salud mental. Dunne argumenta que, como resultado, los estudiantes “están cautivos, especialmente en la cultura del mundo digital, de una cultura desconectada centrada en pequeñas pantallas de teléfono que inevitablemente bloquean la experiencia generalizada de su entorno. Esta falta de conectividad social hace que los estudiantes sean más vulnerables, especialmente cuando enfrentan los tipos de amenazas sociales, en su mayoría relacionadas con la exclusión, que encuentran en las redes sociales. Las amenazas sociales en las redes sociales pueden incluir el acoso cibernético explícito, pero también puede tratarse solo de preocupaciones por no ser lo suficientemente querido o ser excluido de alguna manera”.
La conectividad social nos permite manejar mejor la amenaza social, dice Dunne: “Una de las hipótesis sobre ‘lo que está sucediendo hoy con los jóvenes’ tiene que ver con la exclusión social. Imagine un grupo de humanos que viven en la sabana hace decenas de miles de años. Si era excluido de ese grupo, estaba muerto. No podría sobrevivir por su cuenta, y no había otro grupo humano al pudiera simplemente acercarse y unirse. Por eso, los humanos están condicionados para ver la exclusión social como mortal. La amenaza social puede ser muy difícil de manejar si uno no tiene una conexión social auténtica con pares que brinden apoyo”.
El uso excesivo de teléfonos y computadoras también aumenta la distracción, lo que tiene efectos negativos en el bienestar. Dunne cita un estudio de la Universidad de Harvard que demostró esta idea: “Al estudiar, las personas reciben ‘alertas en sus teléfonos’ en varios momentos durante el día”, dice Dunne. “Algunas de las preguntas básicas que se les hicieron fueron: ¿Está prestando atención a lo que está haciendo o no? y ¿esta disfrutando? El 47% del tiempo, las personas están distraídas. Y la distracción se correlaciona con no disfrutar lo que está sucediendo. Así que parece que vivimos en un era de distracción”.
Kelson está de acuerdo, pero agrega que no resolveremos este problema mañana. Mientras tanto, podemos aprovechar el uso generalizado de los teléfonos inteligentes para ayudar a los estudiantes a salir adelante: “Creo que muchos de nosotros estamos muy conectados a nuestros teléfonos y eso contribuye al estrés general. Pero a algunos estudiantes les encantan las aplicaciones de meditación para teléfonos inteligentes. Entonces, al mismo tiempo, creo que tiene valor decir: este es el modo que emplean. Naturalmente, recurrirían a las redes sociales, entonces, por qué no decirles, escuché que hay algunas aplicaciones geniales para teléfonos inteligentes. Pueden ser una excelente manera alcanzar a los estudiantes en su situación actual”.
El enfoque UW–Madison: integral, multifacético
Entonces, ¿qué está haciendo la UW–Madison para solucionar este problema? Al igual que muchas universidades, la UW aborda el bienestar de los estudiantes de múltiples maneras.
Aumento de proveedores de atención de salud mental
En febrero de 2019, la vicerrectora de Asuntos Estudiantiles, Lori Reesor, y la ex rectora Sarah Mangelsdorf iniciaron la creación de un grupo de trabajo sobre salud mental. El grupo de trabajo, creado para “abordar las preocupaciones de los estudiantes, profesores y personal sobre el bienestar de los estudiantes de la UW”, emitió un informe en mayo. Desde la publicación del informe, los Servicios de salud de la universidad (UHS) contrataron a 13 nuevos proveedores de salud mental, incluyendo proveedores con un enfoque en estudiantes de color, estudiantes LGBTQ + y proveedores de habla hispana adicionales. Hasta el 20 de diciembre , los Servicios de salud mental ofrecerán un horario extendido por la noche, permaneciendo abiertos los lunes y martes hasta las 7 de la tarde.
Fomentar el bienestar desde el aula
La UW también está tratando de resolver el problema dentro del aula. El curso de Dunne (el que tiene la actividad de la fresa) fue diseñado específicamente para abordar el aumento de ansiedad y depresión entre los estudiantes universitarios. “La idea era crear un curso que realmente, de alguna manera, le diera a los estudiantes los ingredientes para prosperar: ¿cuáles creemos que son las habilidades y el conocimiento que ayudarán a un estudiante a vivir una buena vida?” Dice Dunne.
El fundador del Centro para Mentes Saludables y Profesor de Psicología y Psiquiatría William James & Vilas, Richie Davidson, también enseña en el curso. “Es una oportunidad increíble para un estudiante universitario estar expuesto a un profesional como él”, dice Susan Huber Miller, Directora de Programas académicos y de educación continua en el Centro para Mentes Saludables. Dunne y Huber Miller dicen que la investigación preliminar demuestra que los estudiantes que toman el curso presentan mejoras estadísticas significativas en sentimientos de ansiedad, depresión, resiliencia, conexión y problemas con compañeros de cuarto. “Realmente les está ayudando a atravesar tantas cosas con las que tienen dificultades”, dice Huber Miller.
Aprovechando el poder de la tecnología
Este otoño, junto con el curso, la UW presentó la aplicación para teléfonos inteligentes Healthy Minds. La aplicación aprovecha la investigación del Centro para enseñar la ciencia del bienestar, ayudar a fomentar hábitos diarios que fomenten mentes sanas y brindar herramientas para rastrear el progreso y medir el bienestar. Los estudiantes en el curso de Dunne usan la aplicación tanto dentro como fuera de la clase, pero el Centro ha lanzado una versión disponible para todos. “En el futuro, esperamos crear una versión personalizada de la aplicación para teléfono inteligente para la UW”, dice Dunne.
Apoyando la conexión cuerpo-mente
Los expertos de UW también señalan que la recreación, el ejercicio y la diversión son esenciales para el bienestar. Recreación universitaria y bienestar (RecWell), que solía ser RecSports, cambió su nombre en agosto para reflejar la amplia gama de actividades de bienestar que ofrecen. Su misión, “jugar mucho, ponerse en forma, vivir bien”, involucra tanto el cuerpo como la mente. “Solo queremos apoyar a los estudiantes para que vivan bien en el campus, de modo que cuando se gradúen, sepan cómo cuidarse como necesiten”, dice Lauren DeCarolis, Subdirectora de Compromiso estratégico de RecWell.
Abby Diehl, Subdirectora de bienestar en RecWell, está de acuerdo: “Lo que enfatizamos es que el bienestar es individualizado para cada estudiante. Todas sus perspectivas son diferentes. Todas sus necesidades son diferentes. Así que tratamos de ser intencionales, sabiendo que, por ejemplo, andar en bicicleta no es para todos. Ofrecemos muchos programas diferentes para que los estudiantes encuentren su favorito”. Todos los estudiantes automáticamente son miembros de RecWell: solo necesitan su tarjeta de identificación WisCard para ingresar a las instalaciones y pueden ingresar en cualquier momento en que estén abiertas. “Pero los estudiantes no tienen que venir a nuestras instalaciones para vivir bien”, dice DeCarolis. “Puede significar caminar en lugar de tomar el autobús, tomarse 30 minutos de su semana para meditar o escribir en un diario, o simplemente comer con un amigo. El bienestar puede significar muchas cosas diferentes”. Diehl agrega: “Somos más que un edificio; estamos construyendo un movimiento”.
Brindando oportunidades para conectarse, aprender y reflexionar
El compromiso social y el aprendizaje de nuevas habilidades también son formas en que los estudiantes pueden disminuir el estrés. El Wisconsin Union organiza cada año 2,300 eventos que brindan a los estudiantes oportunidades para tomarse un tiempo lejos de las dificultades cotidianas. La mayoría de los eventos y grupos de la Unión están a cargo de estudiantes. “Por ejemplo, Hoofers organiza esquí recreativo al aire libre, y para aquellos que prefieren quedarse adentro, Wheelhouse Studios ofrece todo tipo de actividades artísticas y espacios creativos durante todo el año”, dice Shauna Breneman, directora de comunicaciones del Wisconsin Union. “El Wisconsin Union cree que el bienestar proviene del cuerpo y la mente. Ofrecemos múltiples formas de que los estudiantes y la comunidad accedan a estos eventos de bienestar. Además de lo académico de los estudiantes, necesitan tomarse un tiempo para divertirse y aprender, solo para divertirse y aprender. Necesitan tiempo y espacio para concentrarse en sí mismos fuera del aula”, dice Breneman. Además de las actividades de Hoofers y Wheelhouse Studios, Union South agregó una Sala de reflexión en 2016. Esta habitación ofrece un espacio para relajarse o reflexionar y disfrutar de la paz y la tranquilidad de la manera que sea más útil para cada persona.
Ampliando el acceso a la terapia grupal
Si los estudiantes de la UW piensan que un entorno de apoyo grupal puede ayudarlos, tienen opciones: Kelson señala que UHS proporciona un horario en línea de terapia grupal donde los estudiantes pueden consultar grupos de apoyo, talleres educativos, grupos de desarrollo de habilidades y más. Agrega que su grupo más nuevo adopta un enfoque único y divertido: “Se llama ‘Mindfully Laugh Out Loud’ y promueve la risa como un enfoque para la salud mental y el manejo del estrés”. Kelson lidera múltiples grupos en la práctica de técnicas y estrategias de conciencia plena (mindfulness). Algunos de ellos requieren una cita inicial rápida, pero muchos funcionan con “simplemente llame y regístrese”, dice Kelson.
No es una fresa
Los padres de estudiantes universitarios se encuentran en una situación única con respecto a ayudar a sus estudiantes. ¿Cómo saben los padres cuándo y cuánto intervenir si creen que su hijo puede necesitar ayuda? Kelson dice que ella entiende la situación: “Soy madre de un estudiante universitario y sé lo difícil que es”, dice con una sonrisa. “Una de las cosas más difíciles de ser padre es soltar el control y dejar que cometan sus errores. Pero a veces, esperar que su estudiante acuda a usted y le diga: Estoy muy estresado o esto es muy difícil es una buena opción. Esperar hasta que pidan ayuda tiene un impacto positivo”.
Además, los padres también deben cuidar su salud mental. Después de todo, hay muchas investigaciones que indican que los padres también están estresados y ansiosos. También para los padres, los expertos de la UW pueden ayudar: Una técnica que enseña Kelson ayuda a conectar la mente y el cuerpo en momentos estresantes: “Si siente una ansiedad creciente, puede conectarse con sus sentidos para ayudar a disminuir esa ansiedad”, dice ella. “Mire a su alrededor y nombre cinco cosas que pueda ver, cuatro cosas que pueda oír, tres cosas que pueda tocar, dos cosas que pueda oler y una cosa que pueda saborear”. Kelson dice que el objetivo de la actividad es traerlo al presente para que no esté enfocado en pensamientos ansiosos. Agrega que: “A veces las personas ansiosas dicen que ‘necesitan distraerse’. Pero yo digo que solo necesita estar presente. Esa ansiedad, no existe porque está mirando a su alrededor en una habitación y viendo cosas que están realmente allí”.
Recuerde, no es una fresa.
Recursos adicionales
- “Relajándose con Rob”: Este podcast, presentado por el consejero de UHS recientemente retirado (y muy querido) Rob Sepich, explora estrategias para reducir el estrés y aumentar la concentración plena (mindfulness).
- Alquileres Outdoor UW y clases de yoga: Todo el año, Outdoor UW (UW al aire libre) ofrece alquileres al aire libre que van desde kayaks hasta raquetas de nieve para ayudar a la comunidad y a los visitantes a relajarse y divertirse afuera. El equipo también ofrece muchos niveles de clases de yoga durante todo el año, incluidas clases al aire libre en la terraza durante el verano.
- Aventuras con los Wisconsin Hoofers: Con 2.000 miembros y creciendo cada día, hay muchas aventuras con los Wisconsin Hoofers. Y el bienestar está integrado con la diversión gracias a las actividades durante todo el año con los seis clubes al aire libre de los Hoofers.
- Sala de reflexión: En el tercer piso de Union South hay una sala de reflexión, creada por el Wisconsin Union en colaboración con múltiples organizaciones estudiantiles, personal, estudiantes y profesores. El equipo creó este espacio como un lugar de retiro donde los miembros de la comunidad puedan disfrutar de paz y tranquilidad durante el ajetreo del campus.
- Creando con Wheelhouse Studios: Alivie el estrés y la ansiedad a través de las artes en Wheelhouse Studios en Memorial Union. Hay estudios que han demostrado que el arte puede tener un impacto muy positivo en la salud, incluida la reducción de los niveles de cortisol, la hormona del estrés, y la mejora del estado de ánimo. Wheelhouse ofrece docenas de clases durante todo el año, tres espacios de trabajo y oportunidades de arte sin cita previa.
- Escale o juegue a los bolos con Sett Recreation: Desarrolle músculos y resistencia escalando el muro de escalada interior de Sett Recreation. Las rutas del muro cambian regularmente e incluyen rutas para muchos niveles de habilidad. Dentro del mismo espacio, los visitantes de Sett Recreation pueden jugar a los bolos, lo que ejercita la parte inferior del cuerpo y estimula el estado de alerta mental.
- Clases grupales gratuitas de acondicionamiento físico en RecWell: Si bien algunas clases grupales de acondicionamiento físico generalmente tienen una pequeña tarifa, son gratuitas durante la semana de exámenes. Las clases grupales gratuitas comienzan el 12 de diciembre, que es el Día de estudio del semestre.
- El regalo de una Sesión de entrenamiento personal: De Abby de RecWell: “Especialmente para los padres, a veces un buen regalo navideño para su estudiante es una sesión de entrenamiento personal. De esa manera, el entrenador personal realmente puede ver cuáles son sus intereses. Y esa es una conexión uno a uno que pueden establecer con alguien para ayudarlos a construir un plan de actividad física que posiblemente nunca hubieran tenido. Es una oportunidad para que los estudiantes encuentren qué actividades físicas les gustan”.
- “Roll In Finals” (Rodando hacia los finales) de RecWell: Este “recreo del estudio de autocuidado” se realiza en la piscina del Natatorium. Habrá rodaje de troncos, una carrera de obstáculos inflable gigante en la piscina, un concurso de bala de cañón y muchas actividades en tierra para aquellos que no quieren mojarse, incluyendo cornhole, ping pong, artículos de regalo RecWell , y comida.